Resulta que hace varias semanas el PP anunció de que iban a hacer una amnistía fiscal para que todos aquellos que tuvieran dinero en el extranjero (no se hacen distinciones de si es dinero negro o no, eso da igual, dinero es dinero) que lo metiera en España y así regularizara su situación. Esos bienes se gravarían con un 10%, algo que para los demás ciudadanos que tributan y pagan sus impuestos religiosamente es una verdadera indecencia. La ley de amnistía fiscal es una oportunidad para los defraudadores de regularizar su situación de una forma increíblemente injusta.
¿Es más importante reducir el déficit en una cantidad que tampoco va a solucionar la crisis de la noche a la mañana y amparar a los defraudadores y criminales que actuar contra el fraude fiscal? Si conoce a alguien que quiere limpiar su dinero dígale que tiene hasta el 30 de noviembre del 2012 y quedará impune.
¿No es un paraíso fiscal un sitio donde se puede limpiar capitales con seguridad y tranquilidad? Ese sitio ahora es España.
El mega casino de Esperanza Aguirre
Otra prueba de que España está haciendo lo imposible por convertirse en un paraíso fiscal de lleno es el plan del mega casino por el que se están peleando Cataluña y Madrid. Las ventajas fiscales que están ofreciendo son diabólicas. Quedarán libre de impuestos municipales, autonómicos, y estatales durante 2 años, ventajas fiscales durante 10 años, se ofrecen 2 años de exenciones de seguridad social...y todo por que se ofrecen puestos de trabajo.
Da igual que se vulneren las leyes laborales, la ley anti-tabaco, la ley del menor cuando se permitirá que menores entren en los casinos, y la permisividad del blanqueo de dinero a través de casinos.
Todas esas leyes se las pasa la derecha por el forro, pero aquí no pasa nada. Repito eso de que Gibraltar es un paraíso fiscal y no se hable más. ¡Viva España!